Bueno hoy me he animado a hacer mi primera reseña, hay que tener en cuenta que no soy muy buena en eso así que... haber que sale. Esta es del último libro que me he leído.
Algunas navidades son inolvidables. Y la de 1998 en Quebec será siempre recordada por un niño que en aquel momento tenía once años. Fue entonces cuando sus padres le anunciaron que iban a separarse. Jamás creyó que algo así podía pasarle a él y se enfadó y lloró como nunca lo había hecho. Y gritó al cielo: «ayúdame», pero él era tan pequeño y el cielo tan grande… Sin embargo, aquella noche se desató la peor tormenta que Quebec había conocido.
Aquella tormenta marcaría su vida y la de sus vecinos, porque las situaciones extraordinarias hacen que las cosas se vean de una forma diferente. y en la pequeña comunidad sumida bajo el manto de hielo florecieron relaciones inesperadas y algunas personas recordaron sentimientos que tenían olvidados.
Mi humilde opinión:
El libro nos cuenta la historia de un niño, dos ancianos, un matemático ruso, un niño golpeador y una bailarina de streptese. Todos tienen una historia y una tormenta que los une.
Aunque el personaje principal es un niño de que sus padres han decidido separarse y él no queriendo ser el niño número catorce de su clase en ir de una casa a otra, le pide ayuda al cielo... en respuesta cae la peor tormenta de hielo jamás vista en Quebec.
La historia nos habla del amor de diferentes formas, no solo el que puede existir entre un hombre y una mujer o el de pareja. Habla del amor filial o del que podamos llegar tener hacia los que nos rodean.
Lo bueno: Es una historia sencilla, entretenida, amena ya que solo cuenta con 211 páginas, tiene capítulos muy cortos, está llena de frases bonitas, la narración me pareció interesante pues alterna de primera persona (el protagonista) a tercera (el autor), después de los diálogos entre los personajes no hay nada, es decir tienes que estar atento a quien está hablando lo que en cierto modo me hizo más ágil la lectura... por esas razones la recomendaría.
Lo malo: Hay una cosa que no me gustó, o más bien no me convenció. A una parte de mi le encantaría que todas las historias terminaran con un "Y vivieron felices para siempre", donde todos terminaran bien y felices. Porque quieras o no a veces uno se encariña con los personajes. Sin embargo, otra parte de mi pensaría que si todo terminara así primero, sería poco creíble y después sería en extremo aburrido. A lo que voy es que esta historia me pareció demasiado rosa, todo feliz y bonito tanto que no me llegó a convencer del todo.
Así que del 1 al 10 le daría un 8.
Es una historia a la que no hay que pedirle mucho, es simple, sin complicaciones pero entretenida y alegre.
¿Qué tal, se animan? ^.^
Saludos!!
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